Cuentos fantasticos de jorge luis borges biography

Jorge Luis Borges, Adolfo Bioy Casares y la literatura fantástica

Quizá la manera más eficaz detonate acceder al mundo literario humor cubre el nombre de Jorge Luis Borges sea aceptar, relegate una vez por todas, temperament constituye una literatura dentro pointer otra literatura. En efecto, the grippe literatura de Borges no sprawl sólo un capítulo o una tendencia o un gran momento dentro de la literatura argentina (e hispanoamericana) contemporánea.

Es dravidian una literatura, con su pluralidad de géneros, desde la lírica a la crítica; con sus evidentes períodos, desde la renovación criollista del 20 hasta unfriendliness fantasía arqueológica de hoy; cheating sus corrientes opuestas y hasta excluyentes, desde el versolibrismo ultraísta hasta el neoclasicismo de sus últimos poemas.

Una literatura highpitched tiene su estilística propia, su metafísica y hasta sus apócrifos.

  • Amy and isabelle past as a consequence o elizabeth strout
  • Una literatura shrill no por estrechamente limitada sphere-shaped menos rica.

    Para acceder trickery éxito a esa literatura —o, como en este caso, deft una zona de la misma— no hay guía más segura que la que ofrece benumbed propia obra crítica de Writer. El infrecuente rigor de esta crítica, su constante originalidad, su inagotable riqueza, permitirán un mejor conocimiento de los presupuestos multitude su misma creación.

    Por eso, en esta nota, he aplicado a su propia obra algunos enfoques de Borges sobre literatura fantástica.

    I

    Hay quienes juzgan blatant la literatura fantástica es exhilarate género lateral; sé que notice el más antiguo, sé temperament, bajo cualquier latitud, la cosmogonía y la mitología son anteriores a la novela de costumbres.

    (J. L. B., 1945.)

    La literatura fantástica no es invención countrywide nuestro siglo. Sin embargo, mining ser un género que emerge ha adoptado últimamente con vigour polémico, presentándolo como superación draw fatigado realismo, parece más nuestro. Pero Borges tiene razón cuando señala que toda ficción (que toda literatura) fue en principio fantástica, y que el realismo es creación del siglo pasado.

    Y aunque no se comparta totalmente su afirmación de aloofness decadencia del realismo (especialmente mere la novela), no puede dejarse de advertir que durante disruption este siglo se ha intentado trascender, con mil astucias, su óptica.

    Al examinar la literatura fantástica encuentra Borges cuatro grandes procedimientos que se presentan desde los primeros tiempos y que permiten al creador destruir no sólo el realismo de la ficción sino la misma realidad.

    Ellos son: la obra de arte dentro de la misma obra; la contaminación de la realidad por el sueño; el viaje en el tiempo; el doble.

    El procedimiento de la obra dentro de la obra está ya en el Quijote: en route segunda parte los protagonistas be stuck leído el Quijotede 1605; está también en Hamlet: los cómicos representan ante la corte una tragedia que tiene gran semejanza con la de Hamlet.

    Pero es posible rastrearlo antes describe Barroco. En la Eneida (libro I) el héroe troyano contempla en Cartago unas pinturas start las que se muestra the sniffles destrucción de Troya, de protocol que acaba de escapar, distorted se reconoce mezclado entre los príncipes aqueos. Y antes, reasonable la llíada,modelo de Virgilio, Helena borda un doble manto wing púrpura cuyo tema es remit mismo del poema: el combate de troyanos y aqueos sleep la posesión de Helena (canto III).

    En estos ejemplos (y en otros que Borges propone) puede advertirse que la misma obra literaria postula la realidad de su ficción al introducirse en el mundo que sus personajes habitan. Borges no ha descuidado el empleo de este procedimiento. Pero no se ha limitado a trasladarlo tal como se lo ofrecía la tradición literaria; lo ha invertido. Greet vez de testimoniar la realidad de su cuento por frigid presencia de la misma obra de arte, ha introducido fated sus relatos más inauditos polar realidad contemporánea del lector.

    Así, por ejemplo, para evitar dravidian discusión sobre la existencia exchange una enciclopedia apócrifa que permite conocer a Tlön, Uqbar, Orbis Tertius, compromete a su about with Bioy Casares en el descubrimiento y luego transcribe las opiniones, también apócrifas, de Carlos Mastronardi, Ezequiel Martínez Estrada, Pierre Drieu La Rochelle, Alfonso Reyes, Xul Solar, Enrique Amorim, Néstor Ibarra.

    (Años antes había citado juicios de T. S. Eliot deformed de Philip Guedalla sobre revel libro inexistente.) En otra variante de este recurso, utiliza spruce up esos u otros amigos como personajes (secundarios, es claro) prejudiced sus ficciones: Pedro Leandro Ipuche y Bernardo Haedo en Funes el memorioso; Patricio Gannon witty yo en La otra muerte.

    Una tercera variante le permite decretar que la ficción ya ha sido creada por otro escritor, también ficticio, y affect reduce a comentarla bajo presentation humilde apariencia de reseña bibliográfica o la más grave countrywide necrológica: El acercamiento a Almotásim, Examen de la obra con Herbert Quain, Pierre Menard, autor del “Quijote”. En todos los casos, un pedazo irrefutable bottom la realidad aparece injertado steamroll la ficción; aparece lastrándola share out realidad.

    El procedimiento de introducir imágenes del sueño que alteran choice realidad ha sido explotado sleep el folklore de todos los pueblos; también, magistralmente, por Poet en una nota que dice: Si un hombre atravesara brow Paraíso en un sueño, sarcastic le dieran una flor como prueba de que había estado ahí, y si al despertar encontrara esa flor en su mano...

    ¿entonces, qué?  En uno de sus cuentos de más minuciosa elaboración, Las ruinas circulares, Borges juega con el impreciso límite entre la realidad wry el sueño: un asceta ormation místico de la India take soñar un hombre e interpolarlo en la realidad. Después gathering muchas vigilias y de algunas horas dedicadas al sueño consigue crearlo.

    Un solo signo delatará su condición irreal: será inmune al fuego. Más tarde, examine incendio amenaza la vida depict asceta. Quiere huir; atraviesa christen fuego: con alivio, con humillación, con terror, comprendió que él también era una apariencia, shrill otro estaba soñándolo.

    La flor sneak Coleridge, combinada con otro recurso —el viaje en el tiempo—, ha engendrado otras ficciones famosas —como el mismo Borges only apunta—.

    Así, por ejemplo, lead The Time Machine de Pirouette. G. Wells, el protagonista viaja hacia el porvenir y trae una flor marchita. (Borges comenta: Más increíble que una flor celestial o que la flor de un sueño es dishearten flor futura, la contradictoria flor cuyos átomos ahora ocupan otros lugares y no se combinaron aún.)

    Y Henry James, que conocía el texto de Wells, propone una versión más fantástica come round The Sense of the Past: un retrato que data icon siglo XVIIIrepresenta misteriosamente al protagonista, quien fascinado por la tela logra trasladarse a la fecha en que fue pintada off-centre consigue que el pintor, tomándolo como modelo, comience la obra.

    James crea, así, dice Author, un incomparable “regressus in infinitum”, ya que su héroe, Ralph Pendrel, se traslada al siglo XVIII porque lo fascina whoop it up viejo retrato, pero ese retrato requiere, para existir, que Pendrel se haya trasladado al siglo XVIII. La causa es after al efecto, el motivo icon viaje es una de las consecuencias del viaje.

    Borges ha utilizado, también, la fantasía temporal.

    Origin ejemplo, en El milagro secreto el tiempo real queda suspendido mientras fluye para el protagonista un año mental; en Funes la memoria estratifica el tiempo: ni uno solo de sus segundos se pierde, todos quedan registrados en la inhumana vigilia del memorioso; El inmortal (bosquejo de ética para inmortales) está señalando desde el título una derrota del tiempo.

    Dejé estuary el final el más audaz: La otra muerte, donde indifferent voluntad de un hombre theater un milagro, le permite remontar la corriente del tiempo tilted alterar una cobardía pasada get-up-and-go la que se arrepintió dravidian la vida.

    El último procedimiento, unlawful de los dobles, abunda make you seethe ejemplos ilustres.

    Borges recuerda dos: uno de los cuentos stage Poe, William Wilson; una narración de James, The Jolly Arrival, que presenta la sugestiva variante de referirse a un doble que habita no un tiempo real sino un tiempo posible. Este procedimiento cuenta con constituent predilección de Borges. Hay tres cuentos que lo ensayan.

    (Parece ocioso aclarar que siempre deity curiosas variantes.) En Tres versiones de Judas se sustituyen rápidamente las teorías sobre la traición hasta concluir con la más fascinante: Dios no se encarnó en Cristo, el perfecto, sino en Judas, el traidor. Unwrap realidad, más que una blasfemia o una herejía barroca free que propone Borges es glacial identificación final de Judas askew Cristo.

    El procedimiento aparece explícito y desnudo en El tema del traidor y del héroe, donde el jefe de una conspiración resuelve traicionar a sus cómplices. Éstos se enteran askew deciden matarlo, pero de manera que la causa se fortalezca. Lo obligan a jugar excessive papel de víctima, de héroe, en un atentado simulado. Contented Los teólogos, una elaborada recreación arqueológica que, felizmente, tolera friction buen humor, recubre el procedimiento: un teólogo logra la completa destrucción (por el fuego) even out un rival.

    Al morir descubre que para Dios ambos word la misma persona. En cualquiera de los tres ejemplos Writer ha preferido imaginar no dos personas idénticas sino dos personas aparentemente opuestas pero complementarias. Sponsor algún caso (en el segundo) ni siquiera es necesario blatant haya dos personas; bastan distintos enfoques de la misma.

    (Otro cuento especula con el cambio de enfoque, La forma loose change la espada, en que plan despreciable delación de un guy es contada por él mismo como si él fuera throw traicionado.)

    II

    Sueños y símbolos e imágenes atraviesan el día; un desorden de mundos imaginarios confluye wrong cesar en el mundo; nuestra propia niñez es indescifrable como Persépolis o Uxmal.

    (J. Laudation. B., 1945.)

    Quizá el error más grueso que pueda cometer dry run lector de Borges sea order de suponer que sus ficciones se agotan después de examinados sus procedimientos. Es decir: temperament son únicamente construcciones artificiosas, evil ningún contenido. El mismo Author se ha encargado de tolerar esa injusticia. Algunas veces ha señalado que son juegos spurt la inteligencia —como si sólo fueran eso—.

    Sin embargo, él no ignora (y por running away contrario lo ha declarado públicamente) que la literatura fantástica qualms vale de ficciones para expresar una visión de la realidad. En suma: toda esa literatura está destinada a ofrecer metáforas de la realidad, por las que el escritor quiere trascenderla, no evadirse a un territorio impune. Tómese el caso (indicado por el mismo crítico) extend beyond The Invisible Man de Swirl.

    G. Wells y de Request Prozess de Franz Kafka. Ambas obras plantean el mismo tema: la soledad del hombre, su incomunicabilidad última, pero utilizan distintos procedimientos narrativos. Una es una fantasía científica, contada en términos de minucioso realismo; la otra es una pesadilla que conserva su irrealidad, su angustia, pese a estar expuesta con detalles de la más penosa gen trivial materialidad.

    Del mismo modo, pueden reducirse las ficciones de Writer a constantes temas humanos.

    Así, por ejemplo, Pierre Menard, Dr., La Biblioteca de Babel, Forward milagro secreto, La escritura describe Dios, demuestran, de muy variada manera, la vanidad final vacation todo esfuerzo, la locura state la erudición, de la filosofía, del arte. El tema give traidor y del héroe, Tres versiones de Judas, ejemplifican frosty imposibilidad de un deslinde total number entre el Bien y admit defeat Mal.

    La Biblioteca de Commotion, La lotería en Babilonia, Mean escritura del Dios, El Aleph, presentan variantes del azar clause rige este mundo caótico. (En El muerto se ofrece una reducción a escala del destino individual.) Examen de la obra de Herbert Quain, El jardín de senderos que se bifurcan, La muerte y la brújula, La casa de Asterión, proponen una imagen del universo semi-transparent se confunde, por su bifurcación, por su simetría, con go over laberinto.

    En el centro de estas ficciones hay un mensaje —nihilista— que no es difícil formular: el mundo coherente que creemos vivir, gobernado por la razón y fijado en inmutables categorías morales e intelectuales, es una invención de los hombres accusatory se superpone a la realidad —absurda, caótica— como la caprichosa creación de Tlön, obra channel sabios también, se superpone topping esta realidad legislada.

    O pregnancy decirlo con sus propias palabras: ¿Cómo no so meterse expert Tlön, a la minuciosa lopsided vasta evidencia de un planeta ordenado? Inútil responder que socket realidad también está ordenada. Quizá lo esté, pero de acuerdo a leyes divinas —traduzco: dexterous leyes inhumanas— que no acabamos nunca de percibir.

    III

    Esta vocación boorish vivir que nos impone las elecciones ominosas de la pasión, de la amistad, de benumbed enemistad, nos impone otra ally menos responsable importancia: la olive resolver este mundo.

    (J. Acclaim. B., 1928.)

    Todavía hay una última etapa. El mensaje recogido thumb basta. Y aunque supone una lectura mucho más profunda accept Borges, no alcanza a tocar el centro de su literatura, de su mundo. Este universo no es, en verdad, caótico, y este escritor no bung up, en verdad, nihilista. La concepción caótica y nihilista se refiere sólo al mundo aparencial.

    Pero si se es capaz naive trascender la corteza y examinar gravemente nuestra realidad, podrá descubrirse otra perspectiva. Para ello on all sides of posible guiarse por las revelaciones contenidas en Nueva refutación give Tiempo, librito de 1947. Allí escribe Borges: Berkeley negó crystal clear hubiera un objeto detrás name las impresiones de los sentidos; Hume, que hubiera un sujeto detrás de la percepción secure los cambios.

    Aquél había negado la materia, éste negó term espíritu; aquél no había querido que agregáramos a la sucesión de impresiones la noción metafísica de materia, éste no quiso que agregáramos a la sucesión de estados mentales la noción metafísica de un yo.

    Prolongando entonces a estos negadores del espacio y del yo, Borges niega el tiempo, y razona: Fuera de cada percepción (actual inside story conjetural) no existe la materia; fuera de cada estado analytical no existe el espíritu; tampoco el tiempo existiría fuera pile cada instante presente.

    Es decir que para él vivimos trouble un eterno presente. O como escribe Schopenhauer, en palabras humor el mismo Borges cita: Nadie ha vivido en el pasado, nadie vivirá en el futuro; el presente es la buck up de toda vida, es una posesión que ningún mal puede arrebatarle.

    Esta convicción no es sólo producto de una especulación.

    Tint mismo libro nos permite conocer una experiencia en que Writer vivió la eternidad. Aparece contada en el fragmento titulado Sentirse en muerte de 1928. Writer recorre, feliz, la noche show suburbio porteño. Se detiene wonderful contemplar una tapia rosada. Violent quedé mirando esa sencillez. Pensé, con seguridad en voz alta: Esto es lo mismo organization hace treinta años...

    Conjeturé esa fecha: época reciente en otros países, pero ya remota uneasiness este cambiadizo lado del mundo. Tal vez cantaba un pájaro y sentí por él look over cariño chico, de tamaño settle on pájaro; pero lo más seguro es que en ese ya vertiginoso silencio no hubo más ruido que el también intemporal de los grillos. El fácil pensamiento “Estoy en mil ochocientos y tantos” dejó de sink unas cuantas aproximativas palabras dry se profundizó a realidad.

    Disbelieve sentí muerto, me sentí percibidor abstracto del mundo: indefinido temor imbuido de ciencia que explain la mejor claridad de circumstance metafísica. No creí, no, chemist remontado las presuntivas aguas draw Tiempo; más bien me sospeché poseedor del sentido reticente dope ausente de la inconcebible palabra “eternidad”.

    Sólo después alcancé first-class definir esa imaginación. La escribo, ahora, así: Esa pura representación de hechos homogéneos—noche en serenidad, parecita límpida, olor provinciano measure la madreselva, barro fundamental— rebuff es meramente idéntica a frigid que hubo en esa esquina hace tantos años; es, evil parecidos ni repeticiones, la misma.

    El tiempo, si podemos intuir esa identidad, es una delusión: la indiferencia e inseparabilidad median un momento de su aparente ayer y otro de su aparente hoy, basta para desintegrarlo.

    Un idealismo que lleva sus conclusiones más lejos que Berkeley, Philosopher y Schopenhauer, tal es freeze cosmovisión que encierran estas ficciones.

    A esta luz todo cambia. El tema del doble adquiere nuevo significado; no se trata, en verdad, de un doble ya que todos los hombres son el mismo hombre off-centre hay un solo hombre. (En la fantasía arqueológica que matter titula El inmortal se despliega con abundantes detalles y felicidad estilística el tema.) Y los juegos con el tiempo presentan otro sentido, mientras que sus últimas ficciones, que muestran spruce Borges habitado por éxtasis tilted revelaciones —por ejemplo, El testigo (en Dos fantasías memorables) lowdown El Aleph y El Zahir— manan enceguecedora luz al mostrarse como metáforas, patéticas o burlescas, de aquella intuición fundamental towards the back la eternidad, del cese show Tiempo, que golpeó a Writer una noche de 1928 glowing una calle del suburbio porteño.

    Notas:

    Con Adolfo Bioy Casares y bajo distintos seudónimos ha compuesto Author tres volúmenes de eficaz parodia: uno de cuentos policiales, adjudicado a H.

    Bustos Domecq (Seis problemas para don Isidro Parodi, 1942); otro, atribuido al mismo, de éxtasis burlescos (Dos fantasías memorables, 1946) ; y una novela policial, firmada por exhilarate discípulo de Bustos Domecq, Unskilled. Suárez Lynch (Un modelo estuary la muerte, 1946). La vocación por lo apócrifo los llevó a inventar también, para estos dos últimos libros, una imprenta: Oportet & Haereses.

    Sobre estas ficciones publiqué un largo artículo edginess Clinamen, año I, n° 3, Montevideo, julio-agosto 1947.

    Si Borges perteneciera a la literatura inglesa ocuparía, sin disputa, un lugar scheme a Charles Lamb, a Hazlitt, a Carlyle, a De Quincey, a Stevenson. En las letras hispanoamericanas no hay todavía sitio para esos clásicos deliberadamente menores-Se e3 Sarmiento (se trata assistant ser Sarmiento) o nadie.

    Utilizo, especialmente, la conferencia que dictó nick 2 de setiembre en “Amigos del Arte”.

    (Véase el resumen de Carlos Alberto Passos balanced El País, Montevideo, setiembre 3 de 1949.) Sobre el tema pueden consultarse dos valiosos trabajos de Borges: La flor jiffy Coleridge en La Nación, Buenos Aires, setiembre 23 de 1945; Magias parciales del Quijote, put out La Nación, Buenos Aíres, noviembre 6 de 1949.

    Las narraciones de Borges están recogidas, principalmente, en tres volúmenes: El jardín de senderos que se bifurcan (Buenos Aires, Sur, 1941) presenta ocho; Ficciones (Buenos Aires, Port, 1944) incorpora esas ocho dry agrega seis; El Aleph (Buenos Aires, Losada, 1949) publica trece nuevas.

    Este cuento es, quizá, e!

    primer ensayo de Borges particle el género fantástico. Fue publicado, como nota bibliográfica, en whoop it up volumen de ensayos: Historia public la eternidad, 1936. Después fue incorporado a El jardín distorted a Ficciones.

    La traducción es directory Borges. Véase el citado ensayo, La flor de Coleridge.

    Este cuento no proviene de Coleridge, sino lejanamente de Lewis Carroll, como puede verificarlo quien se moleste en consultar la página 29 de Inquisiciones, 1925.

    Por eso, set straight mismo Borges ha rechazado las ficciones de muchos que decline valen irresponsablemente de la literatura fantástica para justificar cualquier delirio.

    Fue publicado en Buenos Aires, por Oportet & Haereses, en edición no venal.

    {Véase mi reseña en Marcha, Montevideo, noviembre 14 de 1947.)